Elon Musk debe pagarle US$600.000 a un exempleado que fue despedido por no responderle un correo electrónico
Exempleado de Twitter en Irlanda ganó un juicio por despido injusto tras no responder al correo de Elon Musk que pedía compromiso con un régimen de trabajo exigente.
Un exempleado de Twitter en Irlanda, Gary Rooney, logró una compensación de aproximadamente US$600,000 luego de ganar un caso por despido injusto. Rooney, quien trabajó en la compañía durante casi una década, era director de “source to pay” en Dublín cuando Elon Musk adquirió la plataforma de redes sociales por US$44 mil millones en octubre de 2022.
Poco después de tomar el control de Twitter, Musk envió un correo electrónico a todos los empleados pidiéndoles que se comprometieran a un régimen de trabajo “extremadamente exigente” o que renunciaran. “Esto significará trabajar largas horas con alta intensidad. Solo el rendimiento excepcional constituirá una calificación aprobatoria”, escribió Musk en el correo. El mensaje también indicaba que aquellos que no respondieran afirmativamente al enlace proporcionado para “ser parte del nuevo Twitter” recibirían una indemnización por despido de tres meses.
Rooney, sin embargo, no respondió al correo. Tres días después, recibió un segundo mensaje de recursos humanos informándole que la empresa asumía que había decidido renunciar y aceptar la oferta de separación voluntaria. “En ningún momento he indicado a Twitter que estoy renunciando a mi posición”, respondió Rooney una semana más tarde, según los documentos recientemente publicados por la Comisión de Relaciones Laborales de Irlanda.
Twitter, bajo la dirección de Musk, trató la falta de respuesta como una renuncia, lo que llevó a Rooney a presentar una demanda por despido injusto. La comisión falló a su favor, destacando que el correo inicial de Musk no proporcionaba términos claros sobre los cambios en las condiciones laborales y que no existía evidencia de que Rooney hubiera renunciado voluntariamente.
El caso de Rooney ha revelado detalles sobre las prácticas de recursos humanos de Twitter bajo el liderazgo de Musk, y sirve como advertencia para otros empleados sobre la importancia de la comunicación clara con sus empleadores. Según expertos en recursos humanos, el manejo de la situación por parte de Twitter fue problemático debido a la falta de claridad en la comunicación y el uso de un lenguaje informal.
Además, el uso de mensajes internos en plataformas como Slack por parte de Rooney fue utilizado como evidencia en su contra durante el juicio. A pesar de que Rooney mencionó en Slack su intención de no continuar en la empresa, la comisión concluyó que estos mensajes no eran relevantes para determinar la terminación de su empleo.
El caso subraya los riesgos que los empleados enfrentan al utilizar sistemas de mensajería interna, que pueden ser monitoreados por los empleadores y utilizados como evidencia en disputas legales. A pesar de que Rooney finalmente ganó su caso, los expertos enfatizan la necesidad de una mayor claridad en la comunicación laboral y el cuidado en el uso de plataformas digitales dentro del ámbito profesional.